Tipos de reciclaje

¿Sabes cuáles son los tipos de reciclaje que existen?

Como sabemos el reciclaje es el proceso al que son sometidos los residuos una vez que han terminado su uso de vida y ya no es posible reutilizados. Estos, son sometidos a un tratamiento de materia. Dando como resultado un producto diferente al original y devolviéndolo al mundo del consumo.

Para poder llevar a cabo este proceso se debe de realizar una clasificación de los residuos. Esta acción esta dentro de las 3 etapas del reciclaje: recolección, clasificación, y reciclar. La clasificación es importante, pues cada material necesita de un proceso de reciclaje diferente.

Tipos de reciclaje

Reciclaje de plástico.

El plástico es un material muy contaminante para el medio ambiente, pues con él se fabrica gran parte de los productos que se consumen. El plástico no sólo se encuentra en las botellas o envases de consumo diario, también se usan para fabricar productos como: electrodomésticos, automóviles, aparatos electrónicos, celulares, computadoras, etc.

El plástico se separa en dos categorías según su tipo de polímero. Uno de ellos son los termofijos, estos no se pueden reciclar, un ejemplo son las llantas; sin embargo, una opción es reutilizarlas. La otra categoría son los termoplásticos; estos, sí se pueden reciclar. Dentro de esta clasificación están:

-PVC: Cloruro de polivinilo y el PET: Polietileno. Son los más comunes.

-También existen: PEAD: polietileno de alta densidad, PP: polipropileno, EPS: poliestireno expandido, PC: policarbonato, PS: poliestireno y PEBD: polietileno de baja densidad.

Estos tipos de plásticos son los que llegan a la planta recicladora. Una vez allí, se hace una nueva separación, pues es necesario que estos se reciclen de manera separada. Esta sub clasificación se hace por el tipo de estructura molecular de cada uno de ellos.

El plástico puede reciclarse de dos maneras:

Reciclaje mecánico

Una vez que está limpio y bien separado, lo que se hace es triturar en pedacitos todo el plástico. Lo que sigue es fundirlo, para finalmente darle la forma del nuevo envase o producto. Este mismo proceso se hace con cada tipo de plástico.

Reciclaje Químico

Este reciclaje es complejo, y no es tan utilizado como el mecánico. La ventaja de este proceso es que no es necesario hacer la sub clasificación de plásticos. Esto sucede porque en este tratamiento se lleva a cabo la degradación de los materiales que componen el plástico. De esta manera se separa lo polímeros de las moléculas, quedando sólo moléculas sencillas. Con lo obtenido de este reciclaje es posible producir cualquier tipo de plástico.

Reciclaje de Papel.

El papel es un material que puede ser reciclado fácilmente, y casi cualquier tipo de papel es candidato al reciclaje. Los papeles que no pueden pasar por este proceso son: el papel fotográfico, papel carbón, o los que tienen algún adhesivo o plastificados, papel higiénico o servilletas usadas.

Sin embargo, el papel va perdiendo sus propiedades con el reciclaje, por lo que no se puede someter a este con regularidad. De cualquier manera, el reciclar papel se vuelve importante pues ayuda a disminuir la tala de árboles.

Cuando el papel llega a la planta tratadora se hace una clasificación para separar cualquier material que pudo haberse metido entre el papel. Una vez que esté limpio, el papel es sometido a una separación, en donde se dividen las fibras vegetales de las impurezas, como los metales y alambres.

Para poder hacer lo anterior se echa el papel en agua caliente, agregándole químicos especiales, que harán que el papel se empiece a desintegrar hasta formar una pulpa o pasta.

Luego, se le vuelve a agregar químicos, para que la tinta se desprenda y pueda salir a flote y ser sacada fácilmente. De esta manera se obtiene un papel limpio de tinta y de cualquier impureza. Finalmente, es necesario secar la pulpa resultante; una vez que se ha hecho esto, se extiende para crear hojas de papel listas para utilizarse.

Reciclaje de vidrio

Este material se puede reciclar una y otra vez aprovechándose el cien por ciento de este. Además, es un material fácil de reciclar. Una vez que el vidrio este en la planta tratadora debe limpiarse y separarse de los diferentes materiales que posiblemente hayan quedado mezclados. Lo más común es encontrar residuos de porcelana, bombillas o latas.

Una vez que esté limpio de todo material externo; se vuelven a limpiar, pero ahora de etiquetas, de tal forma que no quede rastro de papel sobre ellas. Lo siguiente, es hacer trocitos todos los vidrios, para después proceder a fundirlo. Un punto  importante es saber que la energía que se utiliza para fundirlo, es menor a la que se utiliza para su fabricación. Finalmente, una vez fundido, se le vuelve a dar forma para su posterior uso. 

Reciclaje de aluminio.

El reciclaje de este material es muy rentable, pues se utiliza casi todo el residuo para su posterior uso. Además de ser un material muy usado para la fabricación de productos, tiene la ventaja de no perder sus propiedades al momento de sufrir el proceso de reciclaje.

También es necesario hacer un limpia para separar los residuos que no sean aluminio. Cuando se está seguro de tener puras latas de aluminio limpio, estas son aplastadas para formar bloques del mismo peso y tamaño.

Para después ser llevadas a hornos donde se funden. El paso final, es utilizar el líquido de aluminio para hacer hojas de aluminio. Estas hojas son, a las que se les dará una nueva forma para ser puestas de nuevo en circulación.

Reciclaje orgánico e inorgánico.

Todos los tipos de reciclaje mencionados anteriormente son reciclajes de residuos inorgánicos. Con esto me refiero a aquellos residuos que nunca han tenido vida, y que fueron creados por el hombre. Materiales que para descomponerse tendrían que pasar años y años, por lo que es necesario aplicarles un proceso de reciclaje.

Otro tipo de residuo que también se recicla es el orgánico. Estos, son residuos que alguna vez tuvieron vida, como las frutas o verduras. Estos no necesitan de algún proceso para su descomposición. Los residuos orgánicos por lo general son comida; pero los restos de la poda de árboles o arbustos, también lo son; así como los restos de madera.

Los residuos orgánicos pueden ser usados en compostas, un abono natural, esta se puede realizar de manera doméstica o en plantas de compostaje.

Ahora ya lo sabes, cada vez que vayas a reciclar, separa bien tus residuos. Primeramente en orgánicos e inorgánicos, y estos últimos sepáralos según su material; así facilitarás el proceso de reciclaje una vez que estos residuos lleguen a su destino final.